La nueva línea de producción del Parque de Maderas onubense duplica la capacidad de procesado de la fábrica y le permite reducir las horas de funcionamiento y con ello el tiempo de impacto en el entorno
Otra de las inversiones ambientales culminadas en 2013 ha sido la sustitución de los quemadores de los Hornos de Cal para poder utilizar un combustible más sotenible.
10 de junio de 2013. La fábrica onubense de Ence ha parado hoy la actividad en su Parque de Maderas para ultimar el proyecto de la nueva línea de procesamiento de la materia prima en la que ha invertido algo más de 4 millones de euros y con la que duplica su capacidad de descortezado y astillado de madera, algo que permite reducir las horas de funcionamiento y, por tanto, el tiempo de impacto asociado a esta actividad, fundamentalmente ruido.
El Parque de Maderas es la planta encargada de preparar la materia prima para su cocción y extracción de la celulosa. Con esta nueva línea, la fábrica onubense alcanza los 6.700 m3/día de capacidad máxima de procesado de madera, eliminando el turno de noche.
La nueva línea permite a la fábrica onubense procesar toda la madera que necesita en forma de troncos, un dato fundamental para el éxito del proyecto estratégico de Ence denominado “Autopista de la madera” y que consiste en reducir las importaciones extra-ibéricas de madera para la fábrica de Huelva aumentando la compra nacional fundamentalmente en el Norte. Se trata de un gran esfuerzo de gestión y logística de la compañía para garantizar la competitividad de la fábrica onubense y reducir su dependencia de la madera de importación, que suponía ya el 50% de su consumo poniendo en riesgo su viabilidad futura.
Dejar de recibir la madera en astillas desde fuera de la Península Ibérica, además de mejorar la competitividad, aumenta la sostenibilidad y ecoeficiencia del Centro de Operaciones de Huelva que recibe así más corteza, o lo que es lo mismo, más biomasa para alimentar las calderas y producir energía renovable.
Otra de las inversiones ambientales más destacables culminadas en 2013, ha sido la sustitución de los quemadores de fuel de los Hornos de Cal por otros de gas natural, un proyecto iniciado el año pasado y en el que se han invertido 2,6 millones de euros en total. La sustitución de estos quemadores implica significativas mejoras en las emisiones atmosféricas y reducciones a su vez en la generación de residuos y en los riesgos asociados. El gas natural es, respecto del fuel, un combustible más limpio, más seguro y menos contaminante.
En los Hornos de Caustificación es donde se procesa la cal empleada para la recuperación de los productos químicos usados en la cocción y permitir su reutilización, y donde se queman los gases del proceso de cocción para evitar su salida a la atmósfera.
En 2013, las inversiones ambientales previstas en la fábrica onubense de Ence alcanzan los 11,3 millones de euros, enfocadas fundamentalmente a la reducción de las emisiones atmosféricas, la mejora de la eficiencia energética, la reducción del consumo de agua y materias primas, y este año especialmente a la reducción del consumo de combustibles fósiles.
También en 2013 se sigue avanzando en la reducción del impacto oloroso de la fábrica onubense de Ence. Como consecuencia de las acciones correctoras y preventivas impulsadas por los grupos de trabajo creados para alcanzar los Objetivos de Mejora Fundamental que se definen anualmente, en 2012 se logró reducir el impacto de olor en un 47% respecto al año anterior. Para seguir mejorando este parámetro, se ha comenzado el Proyecto de “Caracterización química y sensorial de los principales efluentes difusos de la fábrica de Ence en Huelva” con un grupo de investigación de la Universidad de Huelva.
El objetivo principal del proyecto de investigación es definir cuantitativa y cualitativamente la aportación al olor de las fuentes difusas que existen en el proceso de la producción de celulosa. Las fuentes difusas son puntos de emisión no significativos, que sin entidad suficiente para suponer impacto en las emisiones globales, sí están aportando al impacto oloroso debido a la alta sensibilidad sensorial del olfato humano que lo percibe a partir de proporciones ínfimas como son las trazas por millón.
Esta caracterización será el primer paso para definir medidas novedosas en el mercado tecnológico que ayuden a Ence a alcanzar su objetivo de eliminar las molestias por olor en su entorno cercano.