Ence destinará 8 millones de euros a la conclusión de los planes de eliminación de olores y vapores en Pontevedra

 

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  • La empresa muestra su disposición para colaborar con las administraciones en replicar la experiencia de cesión de energía a la piscina de Ponte Muíños.

16 de septiembre de 2015.– En el año 2010, el impacto oloroso de la actividad de Ence en Lourizán podía ser apreciado, como media, durante 140 minutos cada día. O lo que es lo mismo: 4.200 minutos al mes. Durante todo el pasado mes de agosto, el impacto oloroso se quedó en 29 minutos, menos de un minuto al día. “Todavía es demasiado”, puntualiza el director del Centro de Operaciones de Ence en Lourizán. “Nuestro objetivo es el Olor Cero”.

Ence prevé destinar 8 millones de euros en los 2 próximos años a la consecución de ese objetivo. Y también a continuar avanzando en la reducción de emisiones de vapor a la atmósfera. Vendrían a sumarse a los 8 millones ya destinados en los últimos 5 años a estos objetivos.

Para continuar avanzando en estos objetivos Ence prevé modificar sistemas de conducción de vapor y de gases existentes en la fábrica e instalar, además, nuevos equipos. Los esfuerzos realizados por la empresa en los últimos años para avanzar han señalado el camino a seguir. La eliminación de puntos de emisión –muchos menos hoy– o estrategias como la condensación de vapor han permitido, hasta el momento, ya no sólo reducir el impacto oloroso sino también modificar en gran medida el aspecto de la factoría: la visibilidad de emisiones de vapor es hoy mucho menor. “Pero debemos seguir avanzando», explica Casal. «Lo hemos dicho y lo diremos: queremos construir un ejemplo mundial para nuestro sector en materia ambiental desde Pontevedra. Frente a quienes dicen que lo hay que acabar con el empleo industrial y limitarse a actividades como la pesca y el marisqueo, lo moderno es compatibilizar as actividades, minimizar el uso de recursos, y construir patrones de sostenibilidad”.

Ejemplo de puesta en común de recursos ha sido, en los últimos años, el uso de energía térmica excedentaria del Centro de Operaciones de Ence en Lourizán con la Fundación Rías do Sur para el calentamiento del agua de la piscina de Ponte Muíños. Las adecuaciones previstas permitirán liberar energía térmica. “Creo que podría ser interesante analizar, conjuntamente con las administraciones públicas, la búsqueda de nuevos usos para esta energía térmica que resulta excedentaria”.

Estas iniciativas vienen a sumarse a las ya desplegadas en años anteriores. La reducción de partículas emitidas por Ence  la atmósfera se redujo, en el último trienio vencido (2012-2014) en más de un 37%. Ence prevé continuar mejorando estos niveles, que ya mejoran en más de un 80% la normativa comunitaria, a partir de la Parada Técnica del año que viene. “Queremos ser un ejemplo mundial; no nos cansaremos de trabajar para ello”.