Ence contribuye, a través de su actividad, a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible

A través de su modelo de negocio, basado en el aprovechamiento sostenible de recursos naturales renovables, Ence – Energía y Celulosa contribuye al cumplimiento en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU.

La empresa, líder europea en producción de celulosa de eucalipto y  primera empresa española en producción de energía renovable con biomasa agrícola y forestal, lleva a cabo una decidida apuesta por la sostenibilidad que, consecuentemente, tiene un reflejo en términos de competitividad.

A través de su actividad, la compañía coadyuva a avanzar hacia la descarbonización del sector energético, generando energía renovable en sus plantas independientes de energía y en sus biofábricas –que se abastecen con dicha energía renovable-. Además, las masas forestales que Ence gestiona contribuyen a absorber CO2 de la atmósfera, mitigando los efectos del cambio climático.

Por otro lado, hay que destacar que Ence representa un claro ejemplo de transición de un modelo lineal a la economía circular, ya que su actividad se basa en el aprovechamiento de recursos renovables, como la madera o la biomasa, valorizando sus residuos e incorporándolos de nuevo a su cadena de trabajo, lo que permite reducir el impacto ambiental, colaborando así con el objetivo de producción responsable. Asimismo, su actividad también favorece el consumo responsable, ya que las diferentes variedades de celulosa que produce Ence ofrecen alternativas renovables frente otros productos, como plásticos y diversos materiales derivados del petróleo.

La actividad de la compañía ayuda, asimismo, a la lucha contra la despoblación rural, ya que representa un importante motor de desarrollo en este ámbito. Mediante la producción de celulosa, y a través de su cadena de suministro de madera, la compañía contribuye a generar empleo y valor para contratistas, suministradores y propietarios forestales en España. Además, la generación de energía con biomasa en las plantas de Ence ayuda a llevar a cabo una transición energética justa, ya que es un motor de empleo sostenible en dichos entornos rurales.

Por último, el modelo de gestión de la compañía hace especial hincapié en proteger la vida de ecosistemas terrestres, ya que lucha contra la deforestación y realiza una gestión sostenible de las plantaciones forestales, apostando por la certificación forestal tanto en su patrimonio como en toda su cadena de suministro. Del mismo modo, Ence contribuye a prevenir incendios forestales, promoviendo una gestión forestal activa y retirando la biomasa forestal sobrante, lo que reduce el riesgo de incendio.

El compromiso ambiental de Ence, basado en el cumplimiento riguroso y exhaustivo de la normativa vigente, está acreditado por diversas certificaciones medioambientales, e incluso cuenta con distinciones internacionales como la ecoetiqueta Nordic Swan, sello de los países nórdicos, por cumplir con los criterios más exigentes de respeto ambiental.