La biofábrica de Ence en Navia constituye un motor económico y de actividad industrial en el Occidente de Asturias, siendo al mismo tiempo referente en sostenibilidad y cuidado del entorno. En este sentido, y para continuar participando de un desarrollo industrial sostenible y potenciar al mismo tiempo la vertebración del territorio, Ignacio Colmenares, presidente de Ence, ha firmado un protocolo con el Principado de Asturias y otras empresas asentadas en la zona para ejecución de nuevas infraestructuras hidráulicas en el estuario naviego.
El acuerdo fue suscrito en el Casino de Navia por el vicepresidente y consejero de Administración autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático, Juan Cofiño; el presidente de Ence, Ignacio Colmenares; el delegado del área industrial de Industrias Lácteas Asturianas (Illas), Ricardo González; y por el director general de Biogastur Generatión Navia (BGN), Francisco Sanmartín. Asistieron también la viceconsejera de Medio Ambiente y Cambio Climático, Nieves Roqueñí, y el alcalde de Navia, Ignacio García Palacios.
Este protocolo tendrá una vigencia de un año y podrá prorrogarse por otros tres. Facilitará la identificación y desarrollo de opciones, tanto técnicas como de trazado, para acometer un proyecto que permita optimizar la gestión de los efluentes a través de un nuevo emisario submarino.
Según ha señalado en su intervención Ignacio Colmenares, la firma de este protocolo es buena muestra de cómo Administración y sector privado deben “trabajar con visión de futuro, para que las empresas puedan invertir, generar riqueza y mantener actividad”, ha indicado.
El impulso de nuevas infraestructuras permitirá avanzar en el desarrollo sostenible de la industria en la zona. En este sentido, la biofábrica de Ence constituye un paradigma de contribución a la economía circular: en todo el proceso de producción de la celulosa, la planta produce y opera con materiales de origen natural, renovables y reciclables. Al mismo tiempo, se autoabastece de energía eléctrica renovable a partir de la biomasa utilizando para ello la lignina, un componente de la madera que constituye un excelente biocombustible renovable y natural, así como restos forestales.
De este modo, los más de 6.900 puestos de trabajo vinculados a Ence Navia contribuyen con su labor diaria, a reducir la intensidad energética y la huella de carbono, avanzando en el camino de la transición ecológica y contribuyendo al desarrollo del medio rural, a través de la creación de empleo sostenible.